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"Buenos días a los dos. Ahora siéntense y charlemos". |
(Los campesinos llegan con el presidente Cárdenas.)
Leonardo Guillén: Buenos días, señor presidente.
Presidente Cárdenas: Buenos días a los dos. Ahora siéntense y charlemos.
Filiberto Crespo: Oiga señor, ¿recibió los telegramas?
Presidente Cárdenas: ¿Telegramas? ¿Cuáles?
Filiberto Crespo: Pues los que les mandó Hipólito, señor.
Leonardo Guillén: Pues al parecer no los recibió.
Presidente Cárdenas: Bueno, eso dejémoslo en el pasado. Ahora díganme
todo lo que está pasando por allá. Primero díganme: ¿cómo es la Colorado?
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"...las cárceles están llenas, el cuartel lo mismo". |
Leonardo Guillén: Pues hasta ahora es de lo peor: nadie tiene tierras.
Presidente Cárdenas: ¿Qué más? Díganme, ¿qué pasó en el asalto?
Filiberto Crespo: Pues mire, señor: las cárceles están llenas,
el cuartel lo mismo.
Leonardo Guillén: Señor, necesitamos avión para regresar y una
carta suya para presentarla allá.
Presidente Cárdenas: Cómo no. (Y les escribe la carta.) No se preocupen ustedes, irá para allá el licenciado Gabino Vásquez, para
que hagan la repartición de esas tierras.
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